La investigación de la Justicia federal local determinó que desde la Terminal Puerto Rosario, de la cual los dueños de Vicentin son accionistas, partieron dos buques en junio que llegaron “contaminados” con droga a distintos puertos.
La Terminal Puerto Rosario, que tiene como uno de los principales accionistas a la cerealera Vicentin, fue allanada en el marco de una investigación por la detección de un megacargamento de cocaína de más de una tonelada.
En concreto, en junio pasado de ese lugar salieron dos buques, uno con 568 kilos de cocaína, y otro con 866 kilos. La droga fue encontrada en bolsos colocados dentro de cargamentos de maní en el puerto de Santos, en Brasil, y en el de Rotterdam, en Países Bajos, que era el destino final en todos los casos.
Según la investigación, los cargamentos fueron “contaminados” por transportistas y posiblemente empleados infieles, que ingresaron la cocaína en los buques luego de la inspección de personal Aduana. La causa es desarrollada de forma proactiva hace meses por el fiscal federal Claudio Kishimoto y la Procunar, a través de su titular Diego Iglesias y el fiscal auxiliar Matías Scilabra.
La investigación se inició a partir de un correo electrónico recibido en la casilla de la Procuraduría de Narcocriminalidad, remitido por el jefe de Departamento Narcotráfico y Delitos Conexos de la Subdirección General de Control Aduanero de AFIP – DGA, quien anotició sobre la posible existencia de conductas ilícitas relacionadas con el contrabando por vía marítima.
En las últimas horas se desarrollaron operativos ordenados por el juez Carlos Vera Barros del Juzgado Federal N° 3, en varios domicilios. Se recabó evidencia y se produjeron al menos tres detenciones.
Según relata el portal Rosario3, un contenedor de maní vino desde General Deheza (Córdoba) hacia Rosario el 21 de junio. Y, según las medidas hechas por el Ministerio Público Fiscal y la Procunar, tuvo dos movimientos internos: uno el 22 de junio a las 23.04, cuando fue retirado de estiba original y fue colocado en el piso, y el otro el 24 de junio a las 22.47, cuando fue retirado y llevado a un lugar entre las calles 2 y 3 del predio.
El conteiner fue dejado en un “punto ciego” en el que no puede ser captado por las cámaras de videovigilancia. Y a ese lugar se dirigieron tres camiones, que se retiraron 20 minutos después.
Lo que se pudo reconstruir después es que el conteiner salió de Rosario el 28 de junio, pasó por Zárate el 29 de junio y después llegó al puerto de Santos el 5 de julio, donde fue detectado el cargamento ilícito dentro de un buque Maersk Bermuda.
Del interior se secuestraron bolsos negros con paquetes de droga cuyo logo era “Louis Vuitton” y “Supreme”, similares a los encontrados en un galpón del barrio Empalme Graneros el pasado 26 de agosto, cuando se incautaron 1.658 kilos de cocaína.
Los ladrillos de cocaína se encontraban en paquetes “mango” dentro de dos “big bags” y la particularidad de haber hallado también una especie de material viscoso de color rojizo. Ese tipo de bolsos ya había sido detectado en allanamientos previos, el 26 de agosto, en un galpón donde se se incautó una mínima parte de los 1.658 kilos de cocaína que fue el saldo final de los operativos de la causa denominada “Rosario-Dubai”.
Idénticos bolsos negros fueron detectados en Santos, Brasil, fueron hallados en dos contenedores que llegaron al puerto de Países Bajos. La carga era de 866 kilos de cocaína.
Se investiga si todos los cargamentos corresponden a la misma organización, dada la coincidencia de los empaques, y que ambos cargamentos salieron de la Terminal Puerto Rosario, empresa que tiene a Vicentin como uno de sus principales accionistas junto con la chilena Antares.